James LoMenzo entrevista
James LoMenzo es un veterano en la industria de la música y uno de los bajistas más exitosos del sector. James ha actuado con algunos de los nombres más importantes del planeta como Ozzy Osborne, Slash, David Lee Roth, Megadeth, Zak Wylde y la lista sigue… Hoy en día James toca con la John Fogerty Band junto con el legendario baterista Kenny Aronoff. ¡Juntos forman una sección rítmica a prueba de balas que no tiene límites!
¿Cómo te interesaste por el bajo?
Empecé a tocar la guitarra a los 11 años. Un año después, asistí a un campamento de verano de música y arte llamado French Woods. Era un cantante bastante bueno y principalmente tocaba acordes en la guitarra para acompañarme cantando. Alrededor de este tiempo, estaba desconcertado y bastante intimidado para continuar con la guitarra, especialmente cuando vi a Jimi Hendrix en la película de Woodstock.
De todos modos, lo del bajo apareció en French Woods. Había escuchado un sonido que pronto descubriría que era un bajo. Un tipo lo tocaba en la sala de ensayo y el sonido se extendía por todo el lago.
Estaba intrigado y fui al pasillo y me encontré a un tipo llamado Gene tocando un Gibson EBO. Fue genial y me invitó a probarlo. Inmediatamente me cautivó, tuvo sentido para mí como un instrumento puente entre el ritmo y la tonalidad compositiva. Pensé, «esto sería genial, un instrumento que puedo tocar y seguir cantando a la vez».
Gene se ofreció a dejármelo para tocar en el campamento durante el resto del verano, lo cual fue una oferta que acepté con entusiasmo. Inmediatamente monté una banda con otros músicos, ¡mi primera banda de rock! Tocábamos lo que salía en la radio ese verano junto con éxitos de rock anteriores que pudimos descubrir.
Irónicamente, una de las primeras canciones que aprendí fue «Down on the Corner» de Creedence Clearwater Revival (irónicamente porque recientemente he estado tocando en la banda de John Fogerty). En todo caso, ¡después del verano me enganché! Cuando llegué a casa, lo primero que hice fue quitar la cuerda B y E agudas de mi guitarra y bajar el control de tono de mi amplificador para que sonara como el bajo lo había hecho en el campamento.
Después de un tiempo, ahorré lo suficiente para comprar un bajo japonés barato. A principios de los setenta fue un momento perfecto para adentrarse en el instrumento, el papel del bajo en ese tiempo se estaba expandiendo realmente, había tanta inspiración nueva cada día, el rock progresivo, el blues, el funk y la música pop estaban explotando el bajo como una voz de arreglo definitiva. Fue increíble aprender y explorar el instrumento en aquel tiempo.
¿Cuál fue el primer álbum que tuviste?
Creo que fue “Sgt. Peppers Lonely Hearts Club Band ”, esto fue antes de que yo considerara ser bajista. Volver a él una vez que comencé a tocar el bajo fue una revelación.
¿Recuerdas tu primer concierto?
El concurso de talentos de la Biblioteca Pública de Brooklyn. Había un anuncio al que respondí. Había construido un repertorio de canciones que podía cantar y tocar con la guitarra acústica, ¡así que lo hice! Curiosamente, estaba más emocionado que nervioso.
Fue genial tocar frente a una sala llena de extraños. Hasta entonces, solo había tocado para amigos, familiares y cualquier persona de mi vecindario que se presentara. Siempre obtuve una gran respuesta, así que pensé que era hora de «alcanzar el gran momento» (risas).
Has participado en el diseño de pedales para empresas como Ashdown. ¿Cómo sucedió eso? ¿Hay nuevos productos en camino?
En el caso del Ashdown Hyperdrive, esa idea había estado rumiando en mi mente durante un tiempo. Fue diseñado para replicar un sistema de bajo / amplificador que se me ocurrió a principios de los 80. En aquel entonces, tomé un genial Alembic Serie 1 usado de 1977. Tenía una salida estéreo (pastilla delantera / trasera) con un fantástico filtro de barrido tipo wah wah.
Puede barrer la frecuencia pico y configurarla para acentuar un tono pico para cada pastilla. Enviaría la pastilla frontal a un potente amplificador de bajo limpio y enviaría la pastilla del puente a un amplificador de guitarra. En este caso fue un combo de guitarra Mesa Boogie. Usaría el filtro de barrido para ayudar a enfocar el impulso del Mesa Boogie.
El diseño del pedal Hyperdrive era acercarse a eso con un bajo mono estándar. Ashdown hizo un trabajo estelar al darle vida. Estaba emocionado con él, no quería que fuera solo un pedal de apoyo, tenía que ofrecer algo único y útil.
En el momento de su lanzamiento, creo que lo logramos. ¿Cómo surgió? Un día en la feria Musikmesse, estaba en una fiesta con Mark Gooday, propietario de Ashdown. Estábamos charlando en el buffet cuando Mark vio a un bajista muy conocido, ¡uno de los grandes! Se disculpó un momento y dijo que volvía enseguida. Le dijo unas palabras a este caballero y se encontró con una respuesta despectiva. Mark se encogió de hombros, volvió a mí y me dijo: «Iba a preguntarle si quería hacer un pedal signature, pero pasó de mí … (continuó)» ¿Qué tal tú, tienes alguna idea? » … y así fue como sucedió, tuve el honor de ser la segunda opción descuidada de ese bajista en particular… (risas).
Tengo varias otras ideas, por supuesto, una versión mejorada del Hyperdrive junto con otros pedales, pero es un compromiso a largo plazo para una empresa y los mercados están saturados en este momento. Mark y Ashdown siempre serán la primera opción si eso llega.
¿Cuál es tu bajo principal hoy en día y que equipo estás usando?
Durante los últimos diez años he tocado todos los bajos de Yamaha. Me han hecho algunos instrumentos personalizados geniales basados en su línea BB. También he usado los modelos de Billy Sheehan. Son fantásticos, especialmente cuando no quieres mimar un instrumento, están construidos como tanques. En todos mis bajos, incluidos los bajos Billy Sheehan, tengo 3 pastillas. Una gran humbucker estilo EBO en el mástil, una P estándar en la posición habitual y una P Mirrored en el puente. La P Mirrored la saqué de mi viejo Warwick Buzzard Bass. Agrega un contenido armónico rico y genial y una articulación con más potencia que la pastilla de bajo Jazz habitual en esa posición. Últimamente, he vuelto un poco «al huevo», por así decirlo.
Recientemente limpié mi viejo bajo Alembic Distillate de escala media. Lo he tenido desde alrededor del ’86. Había olvidado lo maravilloso instrumento que es. Gran electrónica y construcción sólida. ¡Algo bueno que salió de la pandemia!
Para Amps, siempre Ashdown, casi todo lo que hacen es fantástico. Con Fogerty utilizo el CT-300, cabezal a válvulas con pantallas ABM-810. Tengo muchos amplificadores diferentes que han fabricado a lo largo de los años y me encanta lo que hace cada uno de ellos. Todos tienen una personalidad propia única. Para los pedales, por supuesto, mi Hyperdrive.
Los compresores Origen LA76 son mis favoritos y he estado incorporando Line6 Helix para todo lo demás. Actualmente estoy diseñando un paquete de tonos de bajo para Helix que ofreceremos a través del Marketplace de Line6. Mi objetivo es hacerlos empujar el aire y realmente conducir cualquier señal que les llegue. Por último, pero nunca menos importante … cuerdas Rotosound, las he estado tocando desde alrededor de 1973. En estos días me gustan las BS-66 Stainless Steel, son los sets signature de Billy Sheehan.
¿Usas los mismos instrumentos para grabar y en vivo o cambia dependiendo de la sesión?
Cuando grabo, generalmente puedo elegir el adecuado para la canción. Todos tienen algo tonalmente diferente. La grabación es una bestia diferente a tocar en vivo. En estos días, cuando estoy tocando, me inclino más a elegir un bajo que sea capaz de viajar bien. Lo que significa que el alma sea fácil de ajustar y no flote demasiado. También me gustan los instrumentos ligeros. Si pasas mucho tiempo llevando el bajo por aeropuertos y aviones, un bajo más ligero y más pequeño es casi una necesidad. Los BB de Yamaha son geniales para eso. Son buenos para viajar y siempre suenan muy bien, ¡también son divertidos de tocar!
“Pride and Glory” es una de mis grabaciones favoritas de James LoMenzo. ¿Puedes contarnos algo sobre esas sesiones?
Ya sabes, mirando hacia atrás, ese es uno de los álbumes favoritos de mi carrera. Como trío, fuimos muy descarados, Hicimos ese álbum a la antigua, escribimos, ensayamos y grabamos todos juntos, en cinta y siempre en vivo.
Cuando nos instalamos en el estudio Rick Parashars en Seattle, simplemente nos hicimos cargo de la situación. Rick preparó el set up creando buenos sonidos. Pronto empezó a darse cuenta de que se trataba de un tren de mercancías. Se salió del camino por un tiempo y simplemente nos dejó rastrear lo que supongo que fue el movimiento correcto.
Llegábamos todos los días con tres tomas a la casa que compartíamos. Nos drogábamos y escuchábamos para elegir una toma y, curiosamente, sucedía lo mismo todas las noches. Todos decíamos “¡…es demasiado rápido!» «¡Tendremos que volver a grabar mañana»! A la mañana siguiente, escuchando antes de salir al estudio, descubríamos que siempre estaba bien. No sé qué estábamos fumando, pero obviamente nos hacía ir demasiado lentos (risas).
Eres conocido en la escena del Rock y el Metal, pero parece que estás como un pez en el agua en cualquier estilo, ¿de dónde viene eso?
Mi padre era un gran aficionado a la música, cuando mis hermanos y yo éramos muy pequeños, nos ponía discos, todo tipo de música, desde cantantes italianos hasta música clásica y de Big Band. Cuando salió “Meet the Beatles”, mi hermano mayor lo compró y mi padre lo puso en rotación con todos sus álbumes. Veía la música no como un estilo en particular, sino simplemente como música, punto.
Eso aumentó a medida que crecía. En los años sesenta, la radio AM haría prácticamente lo mismo, tenías a Ray Charles y Frank Sinatra, la Motown y The Rolling Stones… todos juntos en sus listas de reproducción. En la escuela secundaria y en la universidad, tocaba la trompa, siempre de manera principal, por lo que me convertí en un experto en comprender e interpretar música clásica.
Para mí siempre ha habido un hilo que conecta todos los estilos, es la comunicación artística inmediata. Es asombroso y, en cierto modo, siempre mágico para mí.
Haces un gran trabajo con la John Fogerty Band a día de hoy, ¡la banda está realmente engrasada! ¿Puedes contarnos algo sobre ella?
Para mí es increíble haber tenido la oportunidad de tocar en la banda de John, un verdadero honor haber sido seleccionado por el mismo. John es el tipo de hombre que sabe exactamente lo que quiere, por lo que es aún más humilde ser elegido después de otros 20 tipos que pasaron la audición. Eso no me convierte en mejor bajista, solo me convierte en el mejor bajista para John, para lo que necesita.
Kenny fue fundamental para llamar la atención de John. El tenía una idea sobre otro bajista y Kenny mencionó que «si te gusta ese tipo, deberías ver a James, él tiene eso y un poco más».
Entonces, la oportunidad de tocar con John y con Kenny, bueno, eso hace que sea una banda tan buena como sea posible. Súmale a Bob Malone, que es un teclista impresionante y al propio hijo de John, Shane, que se ha vuelto un músico realmente notable con el paso de los años, esto hace que sea una gran banda ¡solo cuenta con nosotros y estamos funcionando!
Has estado trabajando bastante con Kenny Aronoff en los últimos años, te recuerdo en un concierto con él en The Baked Potato (LA) hace ya muchos años. ¿Cómo pasó eso?
Conocí a Kenny en una sesión para Bobbie Brown. Estábamos grabando en el antiguo estudio que Frank Zappa que había construido en su casa, ¡que simplemente era genial!
Sabía quien era Kenny, pero nunca había tenido la oportunidad de hablar y mucho menos tocar con él. En esta sesión, simplemente me dejó pasmado. Su compromiso con la música fue contagioso. No lo vi como a los demás chicos de sesión, que por lo general, estén revisando sus relojes todo el tiempo.
Me impresionó tanto que me aseguré de estar en contacto con él. Siempre fue muy amable conmigo cuando lo llamaba. Meses después, un amigo me ofreció un lugar en su restaurante para organizar una jam. Inmediatamente llamé a Kenny y le pregunté si estaba interesado en ser de la banda base conmigo y con Brent Woods y, para mi sorpresa, se unió.
Nos compenetramos mucho después de eso, puedo tocar con él mientras duermo. Más tarde me incorporó a la banda de Fogerty y seguimos adelante. Hacemos grabaciones para gente como The LA Rhythm Section (LA = LoMenzo Aronoff), puedes contratarnos en mi sitio web.
¿Qué importancia tiene un baterista para ti? ¿Te influyen los diferentes bateristas en la forma en que tocas en un determinado concierto?
Los «bateristas muy buenos» están bien, PERO no hay nada como tocar con los grandes. Fácilmente puedo quedarme sin los dedos de las manos y de los pies contando a todos los grandes bateristas con los que he tenido la oportunidad de tocar. Ha sido una de las grandes recompensas de mi carrera.
Lo que hago cuando toco con cualquier baterista nuevo es monitorear sus idiosincrasias personales. Algunos chicos van atrás de la caja o viceversa. Concentrándome en el charles, el bombo, etc. ahí es donde empiezo con cualquier baterista, trato de identificar qué los hace sonar como son ellos. Si puedo llegar a eso más temprano que tarde, entonces puedo ajustar mi interpretación para aprovechar lo que los hace únicos y aprovecharlo, lo que generalmente hará que la música suene enorme.
¿Cómo te preparas para una gira, algún secreto?
Los ensayos siempre son buenos, pero estudiarte los temas y conocerlos bien hace que la primera semana sea mucho más agradable. Si no puedo practicar con la banda y hay poco tiempo antes de la gira, entonces tomaré notas que pueda mirar en el escenario.
Invertí en uno de esos iPads grandes con lápiz y la aplicación «forScore», que es muy útil. Puedo escanear páginas de notas que he escrito y luego en el programa resaltar o hacer nuevas notas de las canciones y luego ponerlas en el set list. Lo puedo poner junto a mi monitor de suelo o al lado de la plataforma de la batería para tener una referencia rápida durante el set.
También tengo un volteador de páginas Bluetooth. Cuando cambio de página, el público probablemente piensa que enciendo y apago los pedales de efectos (risas).
Algunas preguntas rápidas más sobre favoritos…
¿Ciudad? Tokio, Brisbane, Nueva York
¿Libro? Ciencia ficción, como The Man Who Folded Himself, I Am Legend,, nada demasiado embriagador
¿Película? La mayoría de ellas
¿Comida? Italiana, mexicana, griega
¿Bebida? «Lo que sea que esté tomando»
¿Bajo? Alembic
¿Concierto? AC/DC
¿Álbum? No puedo elegir uno
¿Un héroe? Jesucristo, viene a la mente por predicar el amor y el perdón en un mundo que realmente lo necesitaba y todavía lo necesita.
Jan-Olof Strandberg
Fotografías de Prirkko Pörsti
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