Taylor GS Mini-e Maple Bass

Sabemos que Taylor es una compañía norteamericana conocida principalmente por sus guitarras acústicas. Fundada en 1974 por Bob Taylor y Kurt Listug, es reconocida por combinar técnicas de fabricación modernas e innovadoras con la atención al detalle de un maestro artesano, las guitarras acústicas Taylor están consideradas entre las que mejor suenan y las más fáciles de tocar del mundo.

La compañía es pionera en el uso de software, láseres y otras herramientas de alta tecnología y maquinaria patentada, hoy, Bob Taylor es ampliamente respetado en la industria de instrumentos musicales como el visionario fabricante de guitarras acústicas.

Aunque el bajo no es una parte importante en su catálogo lógicamente, ofrecen una referencia el Taylor GS Mini-e Maple Bass al que vamos a echar un vistazo.

 

Taylor GS Mini-e Maple Bass

La serie GS Mini de Taylor está enfocada en la construcción de instrumentos para viajes y para principiantes, GS es la abreviatura de Grand Symphony lo que puede parecer contradictorio en un instrumento mini como este que puede parecer un juguete pero está lejos de serlo.

Al querer Taylor respetar los parámetros de la Serie GS Mini, tuvieron que proponer una longitud de escala realmente corta 23,5”, esto implica también cuerdas específicas para él, por lo que se unieron a D´Addario para crear las EXP PBB190GS.

Estas cuentan con un un núcleo de nailon encerrado en un alambre enrollado de bronce fosforoso, y  son las únicas cuerdas que funcionan con la escala del Mini Bass. Es un compromiso, por supuesto, pero se ve superado por los beneficios que proporcionan ya que las manos se mueven en distancias más pequeñas.

 

Otras adaptaciones para un instrumento como este se dan en el puente de ébano de estilo tradicional que incluye pines de polycarbonato de doble punta. Las cuerdas se enhebran entre las puntas que, a su vez, las anclan de forma segura, creando un sistema esencialmente de autobloqueo pero que hace que los cambios de cuerda sean muy fáciles. Todo un diseño completamente nuevo. El espaciado de las cuerdas en él es de 18 mm.

Este sistema también mejora la calidad del sonido, ya que permite una curvatura más gradual de las cuerdas sobre la selleta blanca de micarta.

En cuanto al equilibrio, el Mini Bass es bastante pesado en el clavijero. Pero, como el bajo solo pesa 1,75 kg , esto no causa ningún problema en la posición sentada que no pueda resolverse colocando suavemente el antebrazo en el cuerpo.

Cuerpo, mástil, electrónica

El bajo cuenta con una pala open book con el centro recortado, muestra el logo impreso de Taylor  y presenta un clavijero dos a cada lado die-cast de cromo. Allí está ubicada la tapa que cubre el acceso al alma del bajo.

La cejuela es de Nubone, un derivado de TUSQ, sin el volumen ni la dureza de este, que cumple su función perfectamente. El espaciado entre las cuerdas en ella es de 11.5 mm

El mástil es de hard rock maple con un acabado varnish natural, un ancho de 1 11/16 pulgadas y un perfil en “C” delgado, confortable y cómodo. Sobre él presenta un diapasón de ébano West African Crelicam que a su vez aloja 20 trastes small de los cuales son accesibles 14,  lo que permite un conjunto decente de opciones de notas de rango medio y graves, registros más agudos no se dan en el GS Mini-e pero claro, este bajo no está pensado para ello.

Para el cuerpo se ha empleado en la tapa sitka, su combinación de fuerza y elasticidad se traduce en un amplio rango dinámico, lo que produce una articulación nítida. Incluye un bracing GS Mini con Relief Rout. Para la trasera y los aros laterales se usó el layered maple que le otorga resistencia a la construcción.

Al respecto de la electrónica monta el sistema ES-B que incorpora los elementos de diseño piezoeléctrico Expression System 2 de Taylor y cuenta con un preamplificador integrado multifuncional con un sintonizador cromático digital incorporado y un control de ecualización de tono activo.

La unidad de preamplificador/afinador cuenta con una pantalla LED para sintonizar e indicación de batería baja, junto con un control de volumen y un ecualizador de 3 bandas.

 

En uso

El bajo desenchufado muestra una buena capacidad de ejecución, la tensión de las cuerdas es baja. No hay lugar de apoyo para el pulgar, como en la mayoría de bajos acústicos.

Claro, hay una ligera sensación de juguete, pero eso se vuelve insignificante gracias a lo bien que suena el GS Mini Bass desconectado.

Dicho esto, la baja tensión de las cuerdas permite un estilo de bajo slap cómodo que los bajos acústicos de tamaño completo tienden a no permitir, aunque ten cuidado con darle muy fuerte que te puedes cargar la cuerda.

Taylor y D’Addario han hecho un excelente trabajo con las cuerdas: son lo suficientemente tensas para una vibración similar a la de un bajo, pero suaves y fáciles de tocar.

Conectado, el rango de tonos que entrega es sorprendente en la cantidad de agudos, además de unos medios fuertes que le dan un timbre ronco. Como era de esperar los graves no son su mejor sonoridad, así que si buscas un tono profundo aquí no lo vas a encontrar.

Si intentas el slap, como comentábamos antes debe ejecutarse con cuidado; hacer tapping es factible, pero complicado; ya que el bajo no ‘contraataca’ cuando lo golpeas fuerte, al no tener la masa necesaria para ello. Hay que tratar este instrumento con cuidado, en otras palabras.

En conclusión, este no va a ser tu bajo principal, pero es una magnífica opción para un instrumento de viaje, un segundo bajo, o para quien se inicia. Cómodo de tocar y con un buen sonido dentro del rango en que se maneja

Will Martin